Escarbajuegos: ₂₉₇ Gauntlet: Slayer Edition (2014)

Tipo: Arcade multijugador
Año: 2014
Estudio: Arrowhead Game Studios

En español: Sí
Multijugador: Sí
Editor: No

Puntuación: 3

Si tenéis ya unos añitos, puede que recordéis la máquina de arcade de Gauntlet, que en 1985 supuso una pequeña revolución del mundo de los videojuegos al permitir compartir pantalla a varios jugadores (hasta cuatro) en un entorno de fantasía medieval (bastante simplón, eso sí), que era lo que pegaba en esos tiempos (mirad si no Dragon's Lair, un poco anterior). Cada jugador debía elegir un personaje de lo que ha venido a ser casi el grupo típico: guerrero, elfo, mago y valquiria (el único femenino), cada uno con sus tipos de ataque y puntos fuertes, y que ha influido en numerosos videojuegos posteriores.

Pues bien, la saga Gauntlet ha tenido ya unos cuantos capítulos, y el último en aparecer (por ahora) fue este Gauntlet: Slayer Edition, que mejoraba el juego presentado el año anterior llamado simplemente Gauntlet, como el original. Me parece, por cierto, que fue el primero de la serie en salir para PC. Los desarrolladores fueron el estudio sueco Arrowhead, nombre que os sonará porque también fueron los creadores del mítico Magicka, y ojo que ambos juegos poseen varios puntos en común, como veremos más adelante.

captura — Mago haciendo lo que hacen los magos.

Pero antes, volvamos a la base. Este Gauntlet renacido es bastante fiel al espíritu del juego original, y podemos jugar con hasta tres amigos (cada uno, eso sí, con su propia pantalla). De hecho, la tienda de Steam permite comprar un pack de 4 unidades por un precio que viene a ser algo más del doble que el de uno solo (por cierto, yo lo compré de oferta a un precio ridículo, os recomiendo esperar hasta que vuelvan a ponerla), lo que ya indica que el multiplayer es su punto fuerte. Y lógicamente cada jugador debe escoger personaje, ¿adivináis las opciones? Exacto: guerrero, mago, elfo y valquiria.

Las diferencias comienzan, obviamente, en el aspecto gráfico, infinitamente mejor que aquel de 1985. Aunque tampoco es que Gauntlet: Slayer Edition destaque demasiado en ese aspecto; cumple y ofrece entornos muy evocadores, con buenos efectos de iluminación y visibilidad, pero por ejemplo Torchlight 2 permitía más libertad de visión y compartía también la generación semiprocedural de niveles. De todos modos se transmite bien ese ambiente de cuevas, tumbas, pozos de lava y demás, y a mí por lo menos me da pena no poder explorar un poco más y que todo sea un mata-mata.

La segunda y principal diferencia estriba en la variedad de ataques y movimientos de los personajes. No sólo cada uno dispome de los suyos (y se especializa en tipos de ataques distintos), sino que es posible comprar equipo y armas que alteran los ataques y poderes del personaje. Esta es a la vez la parte más interesante y desafiante del juego: dominar cada personaje y combinación de equipo. El poder del mago, en particular, recuerda mucho a Magicka, como he adelantado antes. Aquí sus hechizos provienen de combinar sólo tres elementos (agua, fuego y rayo) de dos en dos, pero eso ya son nueve hechizos que tienes que recordar y activar rápidamente, y no es sencillo.

Luego, otro aspecto que nos trae de vuelta a Magicka es la difícil coordinación entre personajes; esta vez no hay "fuego amigo", por suerte (o sería una escabechina), pero sí es posible quedarse con comida y oro que un compañero podría necesitar más que nosotros (ah, no hay honor entre ladrones). Es divertido pero frustrante, y hace falta que todos los jugadores tengan el mismo espíritu lúdico que impregna el propio juego (con esas voces de los personajes soltando continuos chascarrillos), o no se lo van a pasar bien.

Admito que parece injusto criticar a un juego arcade por ser demasiado arcade, pero en general diría que esa es mi mayor queja. En Gauntlet es todo muy poco realista y no hay modo de explorar realmente cada dungeon con sus secretos, sólo de ir acabando con una oleada de enemigos detrás de otra y eliminando los nodos que los spawnean y, ocasionalmente, algún boss. Que por supuesto es lo que debe ser, o no se trataría de un fiel heredero de su ancestro original, pero a mí me van más los juegos tranquilos, con un poco de reflexión y estrategia, y obviamente aquí no hay nada de eso.

El juego es divertido, es sencillo y es rápido. De hecho, en algunos niveles hasta aparece el personaje de la Muerte (así en mayúscula, como en las novelas de Pratchett), que te persigue continuamente para que no te entretengas. Da lo que promete, y nada más. A mí por 20€ me parece insuficiente pero, como digo, con una buena oferta y sabiendo lo que coges, puede resultar muy entretenido.