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lunes, 12 de enero de 2015

₅₄ Ecstatica (1994)

Tipo: Aventura
Año: 1994
Estudio: Andrew Spencer Studios
Multijugador: No
Puntuación: 3

Antes de que los polígonos acabaran por conquistar el mercado de la representación tridimensional, se probó con otras formas que funcionaran razonablemente bien en los ordenadores sin aceleración 3D de los primeros años 90. Una de ellas fueron los elipsoides, de cuyo breve reinado Ecstatica es una buena muestra.

Hay que reconocer que los elipsoides se movían mejor que los cuatro polígonos mal contados de Alone in the Dark (1992), por ejemplo. El problema es que no aceptaban bien las texturas y que a la hora de representar formas orgánicas, francamente, quedaban raros de narices. Así, tenemos un juego con una estética muy particular y que además incorpora elementos de juego muy curiosos, como violencia explícita, desnudos y una ambientación poco explotada.

Bonito pueblo. Y también el... eh... caballo.

Ecstatica nos ofrece la posibilidad de jugar con un protagonista masculino o femenino. Como la historia de fondo no cambia e incluye el romance con una muchacha, tenemos también uno de los primeros juegos gay friendly de la historia, aunque seguramente sólo como efecto colateral. Pero vayamos a la trama. Nada menos que en el año del Señor de 928 (pleno siglo X, toma ya), un viajero se adentra por casualidad en una aldea arrasada por los demonios. Deberá descubrir lo que ocurre y ponerle fin, enfrentándose para ello al mismísimo diablo.

Pero antes de llegar a eso hablemos del pueblo en que discurrirá nuestra aventura. Los edificios por suerte son más bien poligonales, aunque poseen un curioso aspecto redondeado. Muchos de sus antiguos habitantes yacen en su interior, muertos o agonizantes (empalados, ahorcados, crucificados...). Muy educativo, sí. Los puntos de vista de la cámara son fijos y tremendamente variables entre sí, incluso dentro de la misma habitación, y aparte de marearos en las luchas conseguirán que la escuálida aldea os parezca un laberinto en el que daréis vueltas sin ton ni son. Con lo que además os toparéis con las criaturas que merodean por allí, desde una especie de lechones con mazas a dragones, minotauros y hombres lobo. No os cuento siquiera el jaleo que van a suponer los subterráneos, casi más grandes que el pueblo en sí.

Me encanta despertar cabeza abajo
mientras me dan una paliza.

El combate es terrible, os pasaréis más tiempo intentando apuntar el arma que luchando, y nunca sabréis por qué habéis acertado o por qué no. Como en otras aventuras clásicas, no existe un indicador de vida explícito sino que, cuando estéis heridos, el personaje andará renqueante, sujetándose el brazo. Aquí, huir no es sólo una opción sino a menudo una obligación; por suerte los monstruos son tan torpes como vosotros y casi con total seguridad no lograrán seguiros. Aparte de obtusos son bastante tontos: no reaccionan frente a los PNJs a pesar de que supuestamente intentaban matarlos un ratito antes, ni nos quitan el arma de la mano cuando nos atrapan. Pese a todo son duros en las peleas.

Con todo y con eso, y a pesar de una jugabilidad borderline por culpa de unos controles de teclado infames por cuya culpa a menudo nos despeñaremos, el juego tiene su emoción, un entorno único y una historia, aunque compleja y confusa, muy evocadora, precursora de lo que luego serían los survival horror. Hay muchas escenas curiosas y otras duras y crueles que uno no esperaría en un videojuego de la época, incluyendo un final alternativo en el que hacemos un pacto con el demonio y nos pasamos la eternidad rodeados de placeres carnales.

Ecstatica 2.

Es un poco rollo volver a jugar Ecstatica hoy día, porque es necesario montar una unidad virtual como CD del juego para que la detecte, pero si os van las rarezas podéis darle una oportunidad. Tanto para conseguir el juego como para instalarlo bajo DosBox, recomiendo encarecidamente la página de Abandonia sobre el mismo. Y tampoco es mala idea que le echéis un ojo a un walkthrough si no pensáis dedicarle horas y horas, porque lo que hay que hacer hacer para triunfar en este juego no es en absoluto obvio.

Ecstatica 2

En 1996 salió una segunda parte con mejores gráficos y un mundo de juego más amplio. En cuanto a la historia, era muy similar: vuelves con la chica a tu castillo (sorprendentemente eras un príncipe, y tú sin saberlo) cuando encuentras cantidad de cadáveres y una criatura alada rapta a tu amada. En fin, el caso es que alcanzó escaso éxito, seguramente era ya tarde para los elipsoides. Siempre los recordaremos con cariño... snif.

Similitudes razonables con...


Fiend

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