Año: 2011
Estudio: The Goblin Lunatics
Multijugador: No
Puntuación: 3
Y el premio al videojuego con un título más soso es para... 10 Min Space Strategy. ¡Bravo! Plas plas plas.
Dicho eso, el juego que analizamos hoy como reseña extra de verano tiene más chicha de la que parece. Se trata, como su propio nombre indica, de un videojuego de simulación espacial 4X llevada a su mínima expresión. En él combatiremos con otras especies por el control de una región estelar demasiado poblada para nuestro gusto. Aunque lo de "10 minutos" puede ser exagerado, ciertamente no vamos a poder perder mucho tiempo antes de entrar en la masacre. Y aún falta lo mejor: es gratuito. Lo podéis descargar de la página de sus desarrolladores.
Hace tiempo que quería hallar un sucesor al mítico Ascendancy, pero casi todos los juegos de este tipo son extremadamente complejos y hay que dedicarles mucho tiempo para comprender todas sus funciones. Todo lo contrario que el que hoy nos ocupa, al que pese a su sencillez no le sobraría un tutorial o una pequeña guía para no perder el tiempo en nuestras primeras partidas. Pero siendo gratis, no nos vamos a quejar.
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| La creación de nuestra raza, muy completa, con la adquisición de rasgos por puntos. |
La creación de nuestra especie, con sus rasgos y credo (que proporciona ventajas adicionales e incluso un edificio especial) es muy completa para lo que viene siendo habitual. En cambio, la pantalla de juego propiamente dicha es muy simple y, gráficamente, no pasa del aprobado raspado. El problema viene de querer meter demasiada información en poco espacio. Como no hay una pantalla propia para cada planeta, gestionamos cada uno al seleccionarlo desde la parte inferior de la pantalla. En esa misma pantalla controlamos nuestras flotas, sus ataques y el control de planetas y recursos estelares (nubes de gas, meteoritos, etc.), los cuales constituyen una de las mayores novedades de este juego respecto a lo habitual en el género.
Ya que menciono las naves, son seguramente lo más simplista de 10 Min Space Strategy y a la vez lo más importante para alcanzar la victoria. Sólo hay tres tipos: cazas (imprescindibles para atacar), bombarderos (para "limpiar" planetas de población enemiga) y colonizadores (para ocupar planetas despejados y fundar bases estelares). Básicamente el que produzca más cazas por turno tiene todas las papeletas de acabar venciendo, así que ya sabéis.
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| La ventana de juego, muy sencilla, con los planetas, flotas y demás. |
El árbol de investigación, tan relevante en este tipo de juegos, ha sufrido una poda que ni que hubiera recibido la visita de la concejalía de jardines de mi ayuntamiento. Aquí simplemente decidimos en cuál de las cinco ramas (medio ambiente, industria, propulsión, bélico e imperio) enfocamos nuestro progreso, y cada nivel adquirido mejora alguna de nuestras capacidades, como la población máxima, la velocidad de las flotas o el número de planetas que podemos controlar. Eso sí, ciertos avances nos permitirán alcanzar "hitos" que mejoren nuestro imperio, al estilo de los descubrimientos tradicionales.
Seguramente estéis echando de menos un aspecto importante de este tipo de juegos: la diplomacia. Pues aquí no hay de eso. Que nos conocemos, y sabemos que al final te acabarías dando de yoyas sí o sí con todos tus oponentes, así que no vamos a perder el tiempo con chorradas: desde el primer momento estás en guerra con todo dios. ¿Consecuencias? Que no puedes perder el tiempo inicialmente en avances pacíficos, has de expandirte y fabricar naves desde el primer instante. A la larga, una pequeña ventaja en la producción de naves o en sus bonus acabará por decantar la balanza en tu favor, aunque necesitarás muchos turnos para erradicar definitivamente a tus enemigos. En esto sí que peca de simplista el juego, porque no admite diversas estrategias ganadoras.
Los desarrolladores están trabajando en un porting a dispositivos móviles que traerá por lo visto bastantes mejoras. Esperemos que el proyecto llegue nuevamente a buen puerto, o que incluso se atrevan a sacar una segunda parte con mayor flexibilidad en la gestión de nuestro imperio (como política local, diplomacia, tipos de naves, etc.).
Similitudes razonables con...
 Ascendancy |
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