Escarbajuegos: ₆₁ Skylanders: Spyro's Adventure (2011)

Tipo: Aventura
Año: 2011
Estudio: Toys For Bob
Multijugador: No
Puntuación: 4

Skylanders es un sacacuartos muy bien pensado, donde los nuevos personajes para el juego se consiguen comprando figuras físicas (bastante cuidadas, por cierto) que se colocan sobre el "Portal de poder", un accesorio específico que se conecta al equipo por un puerto USB (y además se ilumina y esas cosillas molonas). El desarrollo del juego, por descontado, incentiva la adquisición de nuevas criaturas para superar con mayor facilidad ciertos niveles o explotar todas las posibilidades de estos. Tanto éxito ha tenido la fórmula que Disney se apresuró a copiarla con su Infinity, aunque a mí la mezcla de personajes de las películas me parece una cutrez, mientras que Skylanders posee, además del mérito de la originalidad, el atractivo de un entorno relativamente coherente.

Las figurillas almacenan internamente sus datos, de modo que si vas a jugar a casa de un colega con tu skylander, conserva sus poderes especiales, artefactos y demás zarandajas. Y por supuesto las figuras sirven para cualquier versión del juego (WII, PS, XBox, PC...). Debo reconocer que está bien planeado, aunque al final los padres nos dejemos una pasta.

Gill Grunt en el altar de poder.

El sistema de juego es la habitual aventura en 3ª persona donde se lucha contra una amplia variedad de enemigos, se realizan diversas misiones y se alcanzan metas para superar cada nivel y mejorar a nuestros personajes con nuevos poderes, también exclusivos de cada figurilla. El combate es sencillo, y la mayor parte de los enemigos atacan con lentitud, lo que permite al joven jugador entrenar la típica dinámica de golpear - retirarse - golpear. Tampoco posee nada de crueldad ni imágenes que puedan resultar ofensivas. Eso sí, es un mata mata con unos pocos puzles sencillos, no esperéis más.

La ambientación está bastante cuidada y posee cierto toque Steampunk, nacido quizá involuntariamente de la mezcla de aspectos fantásticos y otros tecnológicos: tenemos robots al lado de goblins y nigromantes, cañones contra hechizos, cosa que se puede comprobar ya desde el principio observando los distintos elementos en los que se dividen los skylanders: Tierra, Aire, Fuego, Agua, Vida, Muerte, Magia y Tecnología. El nombre del juego, dicho sea de paso, proviene de las pequeñas islas flotantes de diverso tamaño que constituyen el mundo que exploraremos, otro aspecto que podríamos considerar steampunk. No os preocupéis mucho por eso, no obstante, porque es imposible caer al vacío, ni sufrir daños por impacto; es un mero elemento del paisaje.

La cosa tiene mala pinta, pero es espectacular.

La historia de fondo no tiene nada de especial: un malo maloso que se creía muerto hace siglos pero que ha regresado para tratar una vez más de dominar el mundo, bla bla blá, lo de siempre. Por lo menos el tipejo en cuestión y su pobre ayudante tienen cierta gracia en su patetismo. Spyro, el dragoncito que da nombre a esta primera entrega y que es uno de los skylanders que podemos manejar, era un bicho de la compañía y ya tenía su propia saga de videojuegos antes de que surgiera este proyecto, pero tampoco podemos decir que sea el protagonista de esta historia: tanto da una figura que otra. De hecho, una cosa que me ha sorprendido es que los personajes que nos rodean no reaccionan en modo alguno cuando el skylander que tenían delante desaparece de su vista de pronto y es sustituido por otra criatura totalmente distinta; siguen hablándote como si nada, incluso prosigen la misma conversación, aunque sea la primera vez que ven a este nuevo ser. ¿Vagancia o simple comodidad?

Un final feliz.

La saga

Con el éxito que alcanzó el juego y sobre todo sus figuras, raro sería que no hubiera dado pie a una saga. Lamentablemente las siguientes partes no salieron para PC, sólo para consolas (pese a que la segunda, Skylanders Giants, llegó a estar anunciada para Windows e incluso apareció su review en alguna revista). Es una lástima porque esas secuelas añadieron nuevas criaturas, diversos objetos y trampas e incluso la posibilidad de combinar dos figuras, pero ya sabéis que yo por el aro de las consolas no paso. La última en salir por el momento, Trap Team, ha aparecido también para tablets, pero sólo para ciertos modelos específicos.

¿Qué motivo puede haber para esta política, evitar la piratería, ahorrarse costes de desarrollo? Ninguno me convence. Porque las figuras no son específicas de una plataforma, con lo que podrían vender el juego para PC online (en Steam por ejemplo) y luego que cada uno se pillara las figuras en tienda física. Así lo único que consiguen es perder clientes.