Escarbajuegos: ₅₈ UnEpic (2011)

Tipo: Aventura de plataformas
Año: 2011
Estudio: Francisco Téllez de Meneses
Multijugador: Sí
Puntuación: 4

Estamos relativamente acostumbrados a disfrutar de juegos indies procedentes de estudios pequeños, que ya tienen mucho mérito de por sí, pero que una sola persona desarrolle todo un videojuego (incluyendo código, música y gráficos) resulta aún más impresionante. Y eso es lo que ha hecho el barcelonés Francisco Téllez de Meneses. No hablamos además de una aplicación breve o experimental, sino de un completo juego de rol de plataformas de tono retro (basado entre otros en The Maze of Galious y con un estilo al que se ha dado en llamar metroidvania), perlado de referencias humorísticas y con un tono mucho más gamberro de lo habitual. Este aspecto, por cierto, dificultó durante meses su incorporación al catálogo de Steam, hasta que fue configurable.

Como podéis intuir por la portada, UnEpic está protagonizado por un joven jugador de rol que de pronto se ve transportado a un enorme e imposible castillo medieval, repleto de monstruos y magia al estilo de las típicas aventuras del D&D. Como era de esperar, nuestro personaje se piensa que todo es una alucinación (provocada en este caso por las drogas) y se dedica a disfrutar de la experiencia cargándose todo bicho viviente y cepillándose a toda "damisela" (por decir algo) que se cruza en su camino.

Estilo clásico de plataformas y escaleras.

UnEpic es absolutamente fiel a su estilo, y el toque desenfadado que tanto ha molestado a algunos puritanos yanquis sólo afecta a los diálogos y algunas misiones particulares, porque por lo demás es un dungeon crawling muy serio. Cuenta con bastantes elementos de rol, no tanto en la elección de personaje (porque salvo en multijugador siempre llevamos al mismo, Daniel) pero sí en la configuración de sus habilidades, armas y equipo. Podemos enfocarlo más hacia el combate cuerpo a cuerpo, o especializarlo en armas a distancia como arcos, o también en diversos tipos de magia. Pergaminos, pociones (con un sistema de creación muy curioso para el que necesitaremos ingredientes y botellas vacías), enemigos de final de fase e incluso mascotas que nos acompañan en nuestra misión son otros elementos que denotan su herencia rolera.

La aventura propuesta es lo bastante larga como para tenernos entretenidos mucho más tiempo de lo que uno esperaría en un juego indie. El castillo comprende cerca de doscientas pantallas, divididas en catorce sectores a los que por lo general sólo podremos acceder tras derrotar a un jefe de nivel, cuya dificultad varia grandemente de uno a otro caso. De manera adicional existe una serie de misiones secundarias, por lo general no demasiado complicadas y que pueden beneficiar en mucho a nuestro personaje. Por si la aventura básica os supiera a poco, recientemente el juego ha incorporado un sistema de multijugador y otro de creación de nuevos niveles por parte de los usuarios, que se comparten a través de la Workshop de Steam.

La "sala de portales" y abajo log, equipo y misiones.

Seguramente sea innecesario detenerse a explicar el gameplay, pero siempre puede haber alguien que no conozca este estilo y, de paso, engordo la reseña. Nuestro protagonista recorre una serie de niveles de un inmenso castillo gobernado por un misterioso ser llamado Harnakon. Su reluctante guía será Zera, una especie de sombra fantasmal que, al ser incapaz de poseer la mente de Daniel, ha quedado atrapada en su interior hasta que éste muera (y, por tanto, está continuamente intentando que nos matemos). Las conversaciones entre ambos son de lo mejor de la historia. Y en cuanto a los niveles, los desafíos se centran principalmente en los combates y, en algunos casos puntuales, en la pericia con los saltos para alcanzar las plataformas. A partir de ahí, matar para conseguir experiencia, dinero, objetos mágicos, mejores armas, subir de nivel y vuelta a empezar, hasta enfrentarnos a Harnakon... y descubrir que las cosas no son lo que parecen. Tan sencillo en su planteamiento como adictivo al probarlo. En cuanto al sorprendente final, sólo puedo decir... "uala, el final mola chacho".

A un pelo del final...

A pesar de que por lo general me encanta llevar magos, esta vez no he investigado demasiado el tema arcano. Por algún motivo me apetecía más ir soltando hachazos, y es que aunque UnEpic permite elegir con mucha comodidad nuestros puntos fuertes, me da que el camino de la magia es de los más complicados. Aunque sólo sea porque existen ocho escuelas arcanas y hay que invertir muchísimos puntos para ser bueno en varias de ellas, y dinero para conseguir los respectivos hechizos. Tengo la impresión de que es más sencillo y rápido avanzar con una buena armadura y un hacha o espada a juego, aunque algunos conjuros son desde luego muy útiles, como el que nos apaga cuando estamos ardiendo (¡cuántos puntos de vida perdidos por no tenerlo!). También es recomendable ser competente en arcos y así poder mantener las distancias. A malas, algunos artefactos te permiten redistribuir tus puntos y, si no, siempre puedes regresar a una zona de fuerte "respawning" y matar bichos hasta subir de nivel y recibir más puntos de características. Viejo como el mundo y tan divertido como siempre.