Escarbajuegos: ₁₁₉ Hope Lake (2014)

Tipo: Objetos escondidos
Año: 2014
Estudio: Far Mills
En español: No
Multijugador: No
Puntuación: 3

Con Hope Lake nos adentramos en un género que he tocado poco en Escarbajuegos, el de objetos ocultos o hidden object games, un mercado al alza cuyos jugadores, a decir de los distribuidores especializados, son principalmente mujeres de mediana edad, aunque no veo nada que impida que lo disfruten otros sectores demográficos.

En Hope Lake el tono es de historia de misterio y crimen pero sin llegar a escenas de terror ni nada impactante, aunque sí hay algo de mal yuyu en los parajes abandonados, esas muñecas sin ojos y demás. Una detective, Kelly Wells, recibe el encargo de investigar el rapto de una joven, la última en una serie de desapariciones de antiguas alumnas de un internado ya abandonado, situado precisamente en Hope Lake.

Rumbo a Hope Lake.

Por si alguien no conoce este tipo de juegos, diré que son similares a las aventuras gráficas (con su inventario, necesidad de usar tal cosa en tal sitio y demás) pero bastante más sencillos en los puzles que plantean y con el añadido de tener que buscar ciertos objetos en entornos confusos llenos de otros elementos que pueden despistar al ojo. No suelen meter prisa al jugador y son decididamente "casual", o sea que puedes jugar un ratito de vez en cuando sin peligro de perder habilidad u olvidar algo importante. Yo los considero el equivalente lúdico a un telefilme de sobremesa: previsibles, poco originales, pero entretenidos para pasar el rato.

Como digo, Hope Lake enfoca su historia hacia antiguos crímenes ocurridos en el viejo internado abandonado, con todos los tópicos previsibles que podáis imaginar. Debo advertir que la historia en sí es absurda como pocas, empezando por el hecho de que un sheriff encargue la misión a una detective privada (¿por qué no va él mismo?) y que esta se presente allí en las mejores condiciones: sola, de noche, sin armas y con una ropa muy poco adecuada para una investigación de ese tipo. Y eso sólo es el principio.

A rebuscar.

El tema de los objetos que necesitamos para avanzar es también ridículo. Por ejemplo, en un momento dado no puedes subir a una casa del árbol porque la escala de cuerda está rota, ¡pero ya llevas en el inventario una escalera que no te deja usar! Que por cierto, cargar por ahí con una escalera de madera de las tochas debe de ser comodísimo. Eso por no mencionar que durante las escenas de "buscaobjetos" cogemos cantidad de cosas que nos serían útiles pero que no podemos añadir al inventario porque sólo es un minijuego. Ah, y en el internado siniestro todo son compartimentos ocultos con combinaciones mecánicas de fantasía, llaves con formas absurdas y demás.

Pero todo esto forma parte de los sobreentendidos de este subgénero y hay que aceptarlos para poder disfrutar del juego. Y Hope Lake en sí es entretenido. Los gráficos, como suele ser habitual, son buenos y detallados (aunque casi en su totalidad puramente estáticos), y la ambientación está conseguida dentro de los tópicos de la temática en cuestión y sabiendo que, hagamos lo que hagamos, no nos va a ocurrir nada malo. El único detalle que se podría considerar original es el de la linterna para iluminar rincones oscuros.

Rincones siniestros.

La dificultad no es elevada, y además se nos ofrece al comienzo de la partida la posibilidad de elegir un "modo fácil" para que las zonas con pistas resplandezcan. Por si eso fuera poco, tenemos a nuestra disposición un mapa completo de localizaciones que también indica dónde hay hilos que podemos seguir, una radio a la que podemos pedir una ayudita de vez en cuando, y la posibilidad de saltarnos con éxito todos los minijuegos (aunque salvo uno o dos, son realmente simplotes; varios incluso clickando a boleo se superan). Nada de bloqueos y nada de callejones sin salida, que es lo que se le pide a estos juegos. A nosotros nos llevó unas cuatro horas terminarlo en modo fácil, y el otro no creo que lleve mucho más tiempo una vez aprendes en dónde pueden aparecer nuevas pistas.

El juego, por desgracia, no está en castellano. Y la versión en inglés aparece notoriamente mal traducida (me parece que los creadores son rusos). Hay varios objetos que debes buscar cuyo nombre es directamente erróneo, y si no recurres a las ayudas disponibles te puedes liar bastante. Un punto en contra que debería haber sido resuelto sin dificultades y que sin embargo sigue ahí, años después de aparecido el juego.

Rescatando a Emily, por fin.

El final, por cierto, es un tanto precipitado, sobre todo después de construir una historia en la que nadie es del todo bueno ni del todo malo (que es de lo más interesante del juego) da pena ver cómo caen en la típica escena de "poli se carga a psicópata cuando no era necesario", y todos felices como si no hubiese pasado nada. Pero esperar profundidad psicológica sería seguramente excesivo para las pretensiones de un juego así.

En resumen, que si pasáis por alto la total falta de coherencia de la historia y el entorno que se nos presenta, y os centráis en los gráficos y la ambientación (y también en la emoción creciente por desentrañar los secretos del internado, que están bastante trabajados), Hope Lake es francamente disfrutable como juego casual. En ningún momento han pretendido sus desarrolladores ofrecer otra cosa, y la calidad de lo que hay es buena. Y las historias de crímenes y venganzas siempre tienen su puntillo, para qué negarlo.