₁₃₉ Dex (2015)

Tipo: RPG
Año: 2015
Estudio: Dreadlocks Ltd.
En español: Sí
Multijugador: No
Puntuación: 5

A primera vista, Dex parece un scroller 2.5D en un entorno futurista, similar por ejemplo a Dark Matter, pero pronto se comprueba que andamos muy equivocados (de hecho el sistema de combate no es de lo mejor del juego). Se trata más bien de un juego de rol (algo limitado como tal, eso sí) en un cuidado ambiente cyberpunk que ofrece mucha libertad de acción para explorar la ciudad de Harbor Prime y los secretos que oculta, y que permite un alto grado de personalización del estilo de juego. Dex está desarrollado por un estudio checo, Dreadlocks, pero nació como un proyecto de financiación colectiva en Kickstarter en 2013, y dos años después vio la luz (¡por una vez el crowdfunding funcionó!). Está totalmente traducido al español.

Harbor Prime, nuestra ciudad.

Nuestra protagonista es Dex, una joven que sin comerlo ni beberlo se encuentra en el punto de mira de una poderosa organización y que podría poseer la clave de lo sucedido con una potente inteligencia artificial que se liberó de sus órdenes iniciales, aunque ella no recuerde nada. La historia principal no es lo más original del mundo, pero lo interesante es que podemos ir invirtiendo los niveles de experiencia y el dinero que ganemos en mejorar las habilidades de Dex y equiparla con mejoras cibernéticas que nos permitan enfrentarnos mejor a los peligros que aguardan. Podemos tirar por el combate (cuerpo a cuerpo o con armas), hackear sistemas, negociar y colarse sin ser detectada, etc. Es imposible mejorar a tope todas las disciplinas, así que conviene pensar pronto por dónde tirar. Yo recomiendo subir lo máximo posible cerrajería y hacking, y luego ya alguna de combate.

Gran ambientación.

Como todo juego de rol que se precie, las misiones secundarias que se nos van ofreciendo son fundamentales para subir de nivel y poder avanzar en la trama principal, además de conseguir dinero y mejoras. Pasan muchas cosas en Harbor Prime, la mayoría malas y siniestras. Si conocéis el ambiente cyberpunk vais a ver que aquí se ha reproducido fielmente: netrunners, drogas, implantes corporales, sexo, una sociedad corrupta controlada por despiadadas macrocorporaciones en la que no te puedes fiar de nadie... Todos los tópicos que se os puedan ocurrir y más, pero bien traídos. La ciudad está dividida en barrios, unos más tranquilos y otros muy peligrosos, y el movimiento dentro de ellos sí es como en un scroller tradicional, avanzando lateralmente por unas cuantas pantallas para llegar de un extremo a otro de la zona. No son enormes, más bien lo contrario, pero cada uno posee sus zonas secundarias como tiendas, pisos, almacenes y demás, muchos con sus misiones correspondientes. Todo esto es de lo mejor del juego y creo que los amantes del género no os lo podéis perder.

El cybermundo.

También hay dos modos de juego "especiales": la realidad aumentada, donde puedes actuar sobre el mundo real desactivando sistemas electrónicos como cámaras y metralletas, y hasta a enemigos de carne y hueso, como alternativa al combate, y el de netrunning donde te cuelas en redes informáticas para obtener archivos comprometedores. Esto de representar el "universo informático" es algo que nunca ha acabado de quedar bien en el género (ni siquiera en los viejos juegos de rol como el propio Cyberpunk 2020), y aquí, aunque funciona, se parece a una especie de Asteroids por pasillos, disparando contra "virus" y "firewalls" que son como navecillas hasta conseguir el nodo de información que buscamos. Un poco raro, la verdad, y frustrante si no tienes cierta habilidad con los mandos. Siempre puedes mejorar tus posibilidades invirtiendo en la habilidad correspondiente, claro.

Combate sanguinario.

El combate a mí no me ha acabado de convencer, funciona pero no enamora. Hasta cierto punto es lógico que resulte incómodo, para que merezca la pena optar por otras aproximaciones como la incursión en sigilo, pero al final siempre va a haber que dar algunas hostias, sobre todo por la experiencia que se gana por enemigo abatido. El sistema elegido para el cuerpo a cuerpo se basa en cubrirse cuando el enemigo ataca y responder cuando se toma un descanso, y más o menos funciona pero sueles acabar bastante damnificado. Yo he optado por las armas de fuego, pero no os creáis que hacen mucho más daño que un puñetazo y las reservas de munición en toda la ciudad son fijas y bastante limitadas. Si podéis acercaros por detrás a un enemigo y retorcerle el pescuezo, siempre merecerá la pena. También hay algunos pasadizos de ventilación y escondites que pueden facilitar la misión, aunque a mí siempre me descubren y tengo que liarme a tiros.

Hola, implantes; adiós, humanidad.

Las mejoras físicas pronto resultan imprescindibles para avanzar, como por ejemplo las piernas mejoradas que permiten alcanzar lugares de lo contrario inaccesibles, los respiradores para adentrarse por cloacas llenas de gases tóxicos, y mi preferido: los nanobots que te van curando automáticamente. Hay muchos más, pero el cuerpo humano tampoco da para todos; de nuevo hay que elegir sabiamente. Por supuesto te los tienen que implantar en una clínica de mala muerte en los bajos fondos, a lo Minority Report. La protagonista siente ciertos reparos al empezar a tecnificar su cuerpo, otro tema recurrente del género cyberpunk, pero es un aspecto que no adquiere mayor relevancia posteriormente. El único DLC que existe para el juego, Extra Outfits, que es gratuito, permite adquirir vestimentas especiales en nuevas misiones y añade así otro factor de personalización, no sólo visual sino con nuevas habilidades de sigilo o combate. En particular el traje de invisibilidad es una maravilla.

Toda la depravación que puedas desear.

Ya podéis imaginar que mi valoración final es muy positiva, incluso teniendo en cuenta los aspectos menos pulidos (que no malos) como el combate o el entorno virtual de hackeo. Es una pena que este videojuego no sea más conocido, y creo que el propio título ha jugado en su contra, "Dex" es un nombre demasiado genérico como para captar la atención (se comenta que está inspirado en la popular saga Deus Ex). Pero nombres aparte, Dex es un juego que capta el espíritu cyberpunk como hace tiempo que no veía. Dirigido a un público adulto, se nota que está hecho con cariño y respeto por el género, y la única verdadera pega que le puedo poner es que no sea mucho más extenso, con más barrios, misiones y personajes. Y quedarse con ganas de más siempre es buena señal.

Similitudes razonables con...

Dreamweb

Syndicate Wars

Noctropolis