₂₂₅ BioShock Remastered (2007/2016)

Tipo: First Person Shooter
Año: 2016 (original 2007)
Estudio: 2K Games
En español: Sí
Multijugador: No
Puntuación: 4

BioShock Remastered es la edición remasterizada (¡no!, ¿de verdad?) del famoso videojuego de 2007, y básicamente tiene mejores gráficos y unos efectos visuales depurados (los del agua y fuego, principalmente, o al menos es donde mejor se aprecia), aparte de algunos detalles adicionales para los interesados en la historia de su desarrollo. Con su compra se incluye el juego original, así que si sois puristas no os veréis enfrentados a una difícil decisión y podréis compararlos sin desembolso adicional. Ya os digo que vienen a ser lo mismo.

Siempre que hago reseñas de juegos muy conocidos me siento un poco bobo porque pienso que todo el mundo sabe ya lo que voy a decir, pero qué le vamos a hacer, peor sería poner una reseña que no explicara lo suficiente. Así que vamos con ello. Bioshock es un first person shooter, un juego de disparos en primera persona del mismo tipo, salvando la distancias, que el mítico Doom o, yéndonos un par de años al futuro, que Ghostbusters: The Video Game. De tu personaje sólo ves las manos (o las armas), y puedes mirar y apuntar a dónde te interese con el ratón mientras te desplazas con las teclas (también admite uso de controlador pero no es imprescindible).

Si algo tiene Rapture son buenas vistas.

La ambientación de BioShock es muy curiosa, diría que es lo que lo convierte en un juego especial. La acción se desarrolla en 1960, cuando nuestro personaje sufre un accidente de aviación que le lleva a descubrir una ciudad oculta en el Atlántico Norte, Rapture. Esta urbe está sumergida en el océano (aunque tampoco a mucha profundidad, he leído por ahí que a unos 150 metros de la superficie) y fue construida a finales de los años 40 como refugio frente a un mundo controlado por las superpotencas y que se consideraba abocado a la destrucción atómica. Debido a eso, meustra un estilismo retro propio de los años 40-50, aunque también hay abundantes elementos y motivos previos, podríamos decir que de art deco, que quedan casi mejor aunque resulten un pelín anacrónicos.

Rapture fue concebida como una utopía liberal, donde el esfuerzo personal y el libre mercado lo guían todo (una mezcla de anarcocapitalismo y las teorías de Ayn Rand, por entendernos). Pero como era de esperar, en pocos años todo acabó como el rosario de la aurora y ahora es una urbe postapocalíptica a punto de destruirse sola. La verdad es que este enfoque político tan alejado de lo habitual, junto a las distintas aclaraciones (grabaciones, documentos...) sobre su progresiva decadencia, es de lo mas original que hay por aquí y hace que sea la ciudad la verdadera protagonista de la historia.

¡Muere, maldito Bid Daddy!.

Por suerte o por desgracia esto es un videojuego de acción, así que hay más elementos de juego que al final convierten BioShock en un mata-mata no muy diferente a tantos otros. Por ejemplo, las investigaciones científicas que siguieron desarrollándose en Rapture (sin ninguna consideración ética) desembocaron en el descubrimiento de una especie de poderes paranormales que se regeneran mediante inyecciones biológicas que podemos ir consiguiendo por Rapture (aparte de un montón de armas más o menos convencionales, algo a mi entender bastante peligroso en una ciudad submarina). Así que vamos por ahí cual supermán dopado cargándonos a todo lo que encontramos con vida (o que se mueva, en general).

Entre los numerosos enemigos, casi todos complicados si no estás atento, destacan a los más famosos que ha dado el juego, los big daddies, que en mi opinión son simplemente demasiado jodidos de matar (y el juego te obliga a cargártelos si quieres tener posibilidades de avanzar en los siguientes niveles), aunque reconozco que su extraña relación con las niñas resulta macabra e inquietante. Y por supuesto la trama principal, que no destriparé aquí, tiene unos cuantos giros con muy mala leche que debo aplaudir, aunque hasta cierto punto se ven venir.

Minijuego para piratear cacharros.

Aunque el juego en su conjunto es muy bueno, en mi opinión la sobresaliente ambientación (tanto estética como social y política) queda un tanto perdida en un first person shooter que simplemente es bueno, pero más o menos a la altura de lo normal para su época. Seamos sinceros, uno puede pasarse todo el juego simplemente atacando sin parar y no prestando la menor atención al resto de elementos, y eso es una pena. Y desde el punto de vista contrario, si lo que te interesa es Rapture y no el combate (como es mi caso), lo vas a tener muy complicado para avanzar (aunque es verdad que como "resucitas" y los enemigos por lo general no se curan, puedes intentarlo una y otra vez hasta que lo logras). Por eso le he dado sólo 4 palas en lugar de 5. Con todo, sólo por el trabajo que hay invertido en esa ciudad submarina retrofuturista ya merece la pena jugarlo, por no mencionar todas las preguntas que nos empuja a hacernos sobre ese capitalismo salvaje en un entorno cerrado, ya de por sí claustrofóbico y proclive a la demencia.

BioShock tuvo un gran éxito (más de 4 millones de copias vendidas, que se dice pronto) y han salido hasta ahora dos secuelas, BioShock 2 (2010) y BioShock Infinite (2013), aparte de otro material asociado como libros y hasta un proyecto de película. Pero creo que para pillar la idea, el juego original es más que suficiente. Si no lo conocéis aún, pilladlo de oferta y disfrutad.

Similitudes razonables con...

Doom	Ghostbusters: The Video Game