Escarbajuegos: ₂₈₇ The Blackwell Deception (2011)

Tipo: Aventura gráfica
Año: 2011
Estudio: Wadjet Eye Games

En español: No
Multijugador: No
Editor: No

Puntuación: 4

Hacía tiempo que no reseñaba una aventura gráfica, y es que competir contra la gran impresión que me dejó Dreams in the Witch House resulta difícil. Pero es un género al que siempre acabo volviendo, y ahora le ha tocado el turno a The Blackwell Deception, con el que la (relativamente) conocida saga de aventuras gráficas sobra la familia Blackwell alcanza su cuarto y penúltimo capítulo.

Aunque realmente no tiene mucho sentido jugar a esta parte si no conoces las anteriores, voy a resumir la trama, que viene a ser común a todas ellas. Nuestros dos protagonistas son Rosa (en Blackwell Unbound era su tía Lauren, pero con el mismo papel), una médium que puede ver a los muertos, y Joey, el fantasma de un detective privado (estilo años 40) que viene a ser como el espíritu familiar, y que la ayuda en la tarea de dar reposo a los fallecidos que no hallan el camino al más allá. Durante el juego puedes pasar en todo momento de controlar uno de ellos al otro, y cada cual lógicamente tiene sus ventajas. Por ejemplo, Joey no puede coger cosas pero es capaz de colarse por puertas y nadie puede verlo, lo que a menudo resulta muy útil.

captura — Joey tiene sus momentos de protagonismo.

Técnicamente, The Blackwell Deception es un point & click de planteamiento tradicional, pixelado pero no exageradamente (se ve bien lo que es cada cosa), con un inventario reducido y un sistema sencillo de gestión de información (algo habitual en los juegos de investigación), que ahora ha pasado a ser el teléfono móvil de Rosa (antes era el ordenador de su casa). Desde él podemos juntar pistas para llegar a nuevas conclusiones, leer el correo electrónico y buscar lugares y personas en la web. Pero, principalmente, la trama se basa en los diálogos: hay que agotar cada opción de diálogo con todos los personajes que encontremos y, en cuanto sepamos algún dato nuevo, volver a hablar con ellos por si acaso. Tranquilos, que no es posible meter tanto la pata que ya no quieran hablar con nosotros, así que adelante, probad todas las líneas a ver qué responden.

Aunque obviamente nos encontramos frente a un juego indie de un estudio pequeño, la verdad es que los fondos y la gama cromática están muy bien conseguidos, lo mismo que los sprites de los personajes. Todas las líneas de diálogo tienen su voz (aunque sólo en inglés, claro), y la música de fondo, principalmente jazz, es muy agradable. Buenos valores de producción, sin duda.

En cuanto al argumento, que para mí se desinfló un poco en el juego anterior, The Blackwell Convergence, esta vez remonta bastante el vuelo. Salvo el primero, todos los "casos" fantasmales que rastrea Rosa están directamente relacionados entre sí y, por una vez, se ve bien qué la mueve a seguir indagando (la muerte de un viejo amigo la lleva a retomar la investigación periodística en la que él estaba metido). Es cierto que el juego, como los tres primeros, es bastante corto y termina justo cuando el misterio empieza a ponerse emocionante, pero si uno se lo plantea como un capítulo de una serie (que es lo que es), resulta plenamente satisfactorio.

Respecto a los puzles, que es un aspecto fundamental en este género, debo decir que The Blackwell Deception se escora decididamente hacia poner la historia por encima de la mecánica. Con esto me refiero a que no hay grandes y complejos rompecabezas, y que la resolución a la mayoría de los obstáculos tira más por hacer avanzar la historia que por devanarse la sesera combinando objetos y lugares.

Por poner un ejemplo de lo que quiero decir, y que me costó bastante superar: hay un momento en que sabemos que alguien que ha sido asesinado perdió antes su móvil, pero no hay quien lo encuentre. La solución es llamar a su número desde nuestro aparato cuando estamos delante de la casa de una sospechosa, de modo que el otro móvil suena y descubrimos que está en una papelera (papelera donde antes la prota se negaba a rebuscar). Es algo que quedaría bien en una película, pero que en una aventura gráfica sólo se te ocurre de chiripa.

Las pegas que le pueda poner a esta cuarta parte de Blackwell son menores. Como ya he dicho, el juego es corto (no mucho, unas 4 o 5 horas), y aunque se revelan aspectos emocionales de cada personaje, un poco más de trasfondo personal habría estado bien (esta vez el apartamento de Rosa está muy desaprovechado, y a veces me he preguntado cómo será su día a día, no siempre va a estar persiguiendo fantasmas). En cuanto al gameplay, algún puzle adicional de enfoque más típico no habría sobrado, pero no por ello deja de ser un buen juego que eleva el nivel medio de la saga.

El precio de The Blackwell Deception es de 9€, que no está mal, y además es frecuente que la saga entera esté de oferta en Steam. Yo tengo ganas ya de terminarla, a ver qué impresiñon global me deja.